Varias panorámicas del cielo de Madrid desde las terraza de los hoteles Palace y Urban, a quienes agradezco permitirme hacer las fotos con la disculpa de un reportaje con dEMO, autor de los ositos, patitos y gatitos que vigilan el horizonte madrileño.
Y aunque no tiene nada que ver con eso, quiero recordar que en la entrada del 15-05 contaba lo sucedido a una reportera de QDQ que tuvo el atrevimiento de preguntar por la privatización del colegio público (en origen, ya que se construyó con fondos de la Comunidad de Madrid y no hay otro en el pueblo) el cual y con toda desvergüenza por parte de los responsables de Educación en Madrid y el alcalde de ese pueblo, ambos del PP, han regalado ya a una empresa que se dedica ...¡al ocio y entretenimiento! Toma ya esa mandarina... Y recordar que en el centro hospitalario al que yo voy y que es el Ramón y Cajal, donde se recortan los servicios y los facultativos por cuenta de la consejería de Sanidad (PP) ayer fueron recibidos Aguirre y Güemes que iban a hacerse la típica foto de todos sonrientes, con abucheos y recriminaciones por lo que están haciendo esos "liberales" para joder la Sanidad y la Educación de los madrileños. Y quiero recordar al "anónimo" que mi Blog no tiene publicidad ni subvención y lo hago con mis imágenes y mis opiniones porque además de buen ojo tengo el resto de mi juicio en condiciones de reflexionar y llamar a las cosas por su nombre, le guste a quien le guste y a quien no... sanpedro se la bendiga, o que se presente a concursos de peloteo pepero, porque yo estoy ahí viéndo y oyendo por lo que sé de lo que hablo. Pero nadie tiene obligación de ver y leer mis opiniones. Y ayer menudo espectáculo que dieron los cuatro viejos carcamales en Génova, que hasta yo que no simpatizo con Rajoy me sentía avergonzado de escucharlo, mientras arriba (donde también estuve fotografiando a los alcaldes con su jefe) unos se partían de risa y otros tenían cara de funeral (los partidarios de Espe, por ejemplo) y se mascaba una tragedia a la salida, porque los "gallardonianos" no se atrevían a levantar la voz en la calle y los otros se liaron a paraguazos a la salida con los alcaldes que salían. Menuda chusma la que agitan lossantos y pedrojota, esos insignes periodistas de la calma y la rectitud moral.