A la vaca Paca (la que se regodeaba feliz despatarrada y con sus tetas sobresaliendo del líquido en un tazón de café Olé u au lait, en français y que, por cierto, es la que va ganando en la encuesta que hace madridiario) le han terminado por arrancar la cabeza, además de la pata delantera de nuevo. Yo creo que la próxima exposición de animales en Madrid debería hacerse en el Zoo, con los burros que se divierten destrozando y pintorrojeando las estatuas y las paredes públicas sin otro interés que hacer daño a lo que es de todos, en ningún caso suyo (que se pinten o rompan sus piernas si tanto disfrutan así) metidos entre rejas con los gorilas, que son mucho más pacíficos que ellos y les enseñarán civismo. Las otras son de tulipanes en el mismo Paseo de Recoletos.