Acabo de recibir un boletín de Amnistía Internacional en el que me comunican que los activistas de esa organización, así como muchos periodistas y extranjeros en Egipto están siendo arrestados en las calles (en TVE contaban que a unos compañeros los han sacado de un taxi, apaleado, quitado y roto los pasaportes y llevado presos a algún lugar desconocido) y conducidos a no se sabe donde. Quiero recordar que Egipto es conocido internacinalmente por sus torturas y crímenes policiales hasta el punto de que los norteamericanos llevaban a presos islamistas detenidos en otros países allí para ser torturados a sabiendas de que sus métodos y secretismo les libraban de sufrir protestas al tener que aplicar tal sistema en su país donde está formalmente prohibido (salvo en Guantánamo, las cárceles secretas de la CIA, las prisiones y comisarías del interior, etc). El asunto es muy serio, porque el dictador Mubarak sostenido durante 3 décadas por occidentales (2mil millones de dolares al año de subvención por parte USA) e israelíes y alabado por sus compadres árabes en el poder como si fuera un Faraón no quiere salir a un refugio dorado saudí como su colega tunecino Ben Alí recien derrocado y pretende morir matando. Y como no quiere que veamos las barbaridades de sus seguidores ataca a la prensa internacional (tras cortar teléfono e Internet) y a los activistas pro-derechos humanos y no sería nada raro que empezaran a cargarse a algunos solo para intimidar. Por favor, y aunque es probable que no sirva de mucho, entra en la página de Amnistía Internacional y firma exigiendo explicaciones y libertad para los detenidos. Haz algo mas de lo que están haciendo los gobiernos occidentales que se conforman con declaraciones ambiguas pidiendo "paz" haciendo dejación de sus obligaciones éticas como demócratas que pretenden ser. El dominó árabe acaba de empezar y no son integristas islámicos quienes conducen las revoluciones en curso, sino la misma gente de la calle harta de miseria y corrupción exigiendo LIBERTAD y DERECHO A VIVIR Y TRABAJAR. La situación, como ocurrió con la crisis económica, no han sabido anticiparla ni los más sagaces cronistas ni políticos y está en su fase de caos iniciado por un incidente -el suiidio de un frutero en Túnez- que produce una tormenta de irritación entre la gente humilde y luego algunos intelectuales o estudiantes y nadie lo controla, por lo que puede ir a parar a un sitio u otro dependiendo de lo que suceda ahora: si los islamistas son los únicos que aparentan comprenderlos y ayudarlos decantarán el resultado, pero si los demócratas de todo el mundo apoyan una revolución laica es posible que no nos suceda como en Irán hace años (y reeditado tras sus últimas elecciones), en Líbano y Palestina, pero sobre todo demuestra que las guerras llevadas por foráneos no llevan la democracia (ahí están Afganistán e Irak, como ejemplos del desastre de sustituir a un pueblo por una invasión, un error que en su día cometía el Che con sus focos revolucionarios y que le costó la vida en Bolivia pero que los fundamentalistas neoconservadores han puesto en práctica en los países estratégicos para controlar esa parte del mundo para sus multinacionales y sobre todo el petróleo. Es posible que después de Túnez y Egipto, empiecen a caer otros autócratas, emires o reyezuelos puestos por las potencias coloniales para explotar a sus pueblos, como en Jordania, Marruecos, Argelia, Mauritania, Yemen y hasta Libia y tal vez algún día ese emporio del machismo más carca y lujoso que controlan los principes amigos de nuestro monarca en los emiratos y Arabia Saudí acaben teniendo que entrar en razón ante sus propios pueblos. También pueden fracasar y convertirse en masacres como Tiananmen en China (y su secuela en una región molesta justo antes de la Olimpiada a sabiendas de que los gobiernos extranjeros tragarían con todo "con espíritu olímpico") o el Irán preJomeini donde las libertades fueron secuestradas por los ayatolas y su guardia contra-revolucionaria y cada vez que los jóvenes persas quieren un poco de libertad esos cabrones los ahogan y machacan. Pero ahora es tiempo de florecer y lo poco que podemos hacer desde aquí nos enorgullecerá mucho más que la mierda de peloteo patético que están haciendo nuestros gobernantes occidentales de derechas o pseudoizquierdas. Y eso es protestar (la foto es de ayer en la Puerta del Sol)..