Esta mañana cuando iba a hacer un reportaje me he encontrado con esta Vuelta Ciclista por la Huelga General (el maillot rojo de líder lo llevaban todos aunque no esté muy claro que vayamos a ganar nada después del día 29S. Yo participaré en la Huelga General a pesar de mis dudas por la actuación sindical, de la casi segura improbabilidad de conseguir que el gobierno pretendidamente de izquierdas no nos vaya a aplicar la Reforma Laboral y otras medidas de ajuste que como siempre nos toca pagar a los trabajadores, los pensionistas y demás sufrientes de la crisis que NO hemos provocado ni nos ha beneficiado en nada ni antes ni después de que los financieros y empresarios del boom del ladrillo y demás especuladores y sinvergüenzas se salgan con la suya y consigan que ni los hagan pagar los desastres de sus operaciones fraudulentas ni se les ponga coto a sus fechorías. Y, además, este gobierno "socialista" nos va a hacer jubilar más tarde, con menos pensión y no es siquiera capaz de meter un impuesto a las grandes fortunas y las transacciones de fondos (lo propone y como los otros no lo aceptan tiene disculpa para no aplicarlo aquí por si se enfadan los ricos). Así que, con todas las dudas del mundo pero al menos con la dignidad de hacer lo que creo que será justo para mis hijos y descendientes ese día quiero sumarme y que sentir otra vez lo duro que es hacer una huelga, que no es una fiesta ni me hace gracia alguna el descuento en mi exiguo salario de la jornada no trabajada voluntariamente. Y sobre ésto me gustaría decir a todos esos intelectuales que se manifiestan a favor de la Huelga, a los sindicalistas liberados que ese día harán su trabajo de siempre pero cobrando, a los artistas y escritores y demás valientes en piel ajena que, al menos, donen a organizaciones contra el Hambre o similares el importe de lo que ganan de media por un día de curro y se sientan un poquito más identificados con nosotros, los que siempre pagamos los trastos rotos.